HISTORIA: Mónica iba a ver a su ex y desapareció; encontraron a sus hijas en la calle

Por Guadalupe i. Ortiz Ramírez

NAUCALPAN (27 diciembre 2019).- Luego de año y medio de separación, Mónica Noemí fue citada por su ex el 13 de diciembre en calles de la Colonia La Tolva, ella acudió con sus dos hijas, pero desde entonces desapareció y las niñas fueron halladas deambulando en la calle.

A la medianoche de ese viernes 13, en redes sociales circuló la imagen de las dos pequeñitas -de 1 y 4 años- que fueron encontradas solas en la calle, los internautas vituperaron a la joven madre por el “abandono”.

En realidad Mónica Noemi Peréz Nonato, de 22 años, había salido a ver a Gustavo N, su ex pareja, quien la citó con el pretexto de que se quería hacer cargo de una de sus hijas. Según testimonios, Mónica fue obligada a subir a un vehículo, donde fue golpeada, mientras las niñas eran dejadas a su suerte.

Familiares de la joven madre publicaron la ficha de búsqueda que se inició por su desaparición y narraron que Mónica y Gustavo se separaron hace un año y nueve meses porque él frecuentemente la violentaba, incluso, la había amenazado de muerte, por lo cual temen por ella y sospechan de él.

Mónica tiene su domicilio en la Alcaldía Azcapotzalco, pero Gustavo la citó en la Colonia La Tolva, donde él es residente.

“Ya no lo veía porque ya estaban separados, pero de la nada ese día, recibe una llamada (…) se lleva a sus dos niñas a San José de los Leones, La Tolva Tercera Sección, pues ahí aparecen las niñas tiradas, pero ella no, lo más raro que por esa colonia vive el hombre”, narró una tía de Mónica.

Las autoridades resguardaron a las menores en un albergue del DIF de Naucalpan, donde fueron entregadas a Gustavo, lo que tiene inconformes a los familiares de Noemí.

“Tenían que dejarlas resguardadas en el DIF ¿por qué las entregaron si su mamá no está? y ahora ni él ni las niñas ni su mamá porque no nos dejó dirección”, recriminó la familiar.

De complexión delgada, Mónica Noemí mide 1.50 metros, tiene ojos color miel grandes, el cabello rubio y lacio hasta la cintura, como señas particulares, tiene una cicatriz de cesárea en el abdomen y en el seno derecho lleva tatuado el nombre ‘Erick’ así como perforaciones en el labio inferior derecho.

Su familia ha visitado hospitales, ministerios públicos y morgues sin lograr ubicarla, temen que se trate de un feminicidio más en territorio mexiquense.

“Una de las nenas dijo que un hombre estaba ahorcado a su mamá y que escupía sangre por la boca y con un fuerte dolor de estómago; esta persona (Gustavo) ya sabía dónde estaban las niñas abandonadas y fue el primero en llegar”, dijo un familiar de Mónica.