Atizapán
Martha ayudaba al presunto feminicida de Atizapán y también desapareció
ATIZAPÁN (26 MAYO 2021). – Fue la mañana del 2 de diciembre de 2017, cuando Martha Andrade Dorantes salió de su casa en la Colonia Lomas de San Miguel, a tan sólo unas cuadras del domicilio de Andrés Filomeno, el presunto feminicida de Atizapán, y ya no regresó.
En ese entonces, su hijo de 15 años le llamó por teléfono varias veces , pero tras varios intentos, ella ya no respondió y a pesar de que su esposo y su familia acudieron a la Fiscalía mexiquense (FGJEM) a denunciar su desaparición, no se realizó ninguna investigación.
Martha se dedicaba a la limpieza de las oficinas del Consejo de Participación Ciudadana (Copaci), y gracias a este trabajo ella recibía despensas que el presunto feminicida gestionaba por ser presidente de la colonia en la que vivían.
“Ella tenía contacto con el señor Andrés y por eso no quisimos descartar que le pudo haber hecho algo a Martha. El señor ayudaba a la gente, daba despensas y le llegó a ayudar económicamente, le ofrecía trabajo de limpieza en las oficinitas donde él entregaba las despensas”, narró una familiar.
Hasta apenas unos días, cuando la noticia de los descubrimientos que se realizaron en el domicilio de Andrés Filomeno , los familiares de la mujer analizaron la situación y consideraron que existe una posibilidad de que entre las víctimas del sujeto se encuentre Martha.
Con esperanzas de encontrar respuestas, su familia se presentó en el Ministerio Público en Barrientos, donde les tomaron muestras para un estudio de ADN y les pidieron esperar.
En tanto, siguen solicitando ayuda para que, en caso de no estar entre las víctimas, pueda regresar con bien a casa.