Ciudad de México
#Acosador Víctima denuncia a guardia por acoso en Metro

CIUDAD DE MÉXICO (6 septiembre 2018).- Con el título «Peligro en el Metro de la CDMX», una usuaria de este transporte denunció en redes sociales el acoso sexual que sufrió el pasado domingo a manos de un guardia de seguridad privada cuando viajaban en un vagón de la Línea B del Metro.
Compartimos íntegramente, la denuncia de la víctima:
«El pasado domingo 2 de septiembre, tuve la peor experiencia en mi vida en el Metro. Cuando regresaba de mi trabajo, aproximadamente a las ocho de la mañana me encontraba en dicho transporte en la Línea B, dirección a Ciudad Azteca, justo en el primer vagón.
Durante el traslado, en la estación Morelos, me percaté que un hombre subió al vagón y caminó detrás de mí.
Al mismo tiempo, noté además que una señora de la tercera edad se encontraba en el vagón (ella se encontraba dormida).
Durante el trayecto, el sujeto se sentó en un asiento reservado, momentos después se cambió de asiento y me miraba, fue cuando noté que el hombre tenía una actitud sospechosa.
Yo estaba en los asientos para cuatro personas, en uno de los lugares del pasillo, ya que trato de no sentarme cerca de la ventana para no quedarme dormida.
El sujeto se levantó y camino hasta dónde yo me encontraba, me seguía mirando y comenzó a tocarse el pene sobre la ropa, tenía una erección.
Me quedé totalmente impactada y tenía mucho miedo, estaba paralizada y al mismo tiempo pensé que si yo trataba de hacer cualquier cosa (gritar o decir algo), el sujeto me podría hacer daño.
Recuerdo que esos minutos se volvieron eternos, tenía una mezcla de emociones: coraje, impotencia, angustia y sobretodo miedo.
No sabía si podría estar armado.
Lo único en lo que pensaba era llegar a la siguiente estación para pedir ayuda. Inmediatamente, el sujeto camino hacia mí, tenía el cierre abajo y rozó su pene en mi hombro por unos segundos mientras caminaba hasta la puerta, me levanté y corrí a otra puerta y jalé la palanca.
El sujeto salió corriendo.
Bajé del vagón, me temblaban las piernas,prácticamente apenas y podía mantenerme de pie.
El conductor gritaba «es ese hombre», había más de 10 policías esperándonos.
El chófer del vagón me dijo que se percató de todo y decidió alertar al personal de vigilancia del metro.
Los polícias lo esposaron, mientras el se resistía, golpeaba a los elementos.
Una mujer del personal de vigilancia me preguntó cómo estaba, que si me había lastimado. No podía ni pronunciar una sola palabra, tomó mi mano y bajamos a las taquillas.
Los policías tomaron mis datos, uno de ellos señaló que el sujeto traía el cierre abajo (con todo afuera) cuando lo atraparon.
Más tarde la mujer de vigilancia me preguntó si quería realizar una denuncia y le dije que sí, me acompañó desde ese momento una policía auxiliar en todo el proceso.
Nos trasladamos a la Fiscalía de Delitos Sexuales, cerca del Metro Insurgentes.
Cuando llegamos, la policía me dijo que todos los días hay bastantes casos similares, la gente no denuncia por diversas razones: falta de tiempo, miedo o vergüenza.
La mayoría quedan libres y continúan haciendo sus fechorías.
En dicho lugar, intentaron persuadirme para que yo llegara a un trato con el sujeto, pero decidí abrir la carpeta de investigación.
En ese momento comenzó el proceso que duró más de seis horas.
Expresé mi testimonio a la psicóloga, la médico legista, así como a los policías de investigación.
El hombre fue puesto en libertad tras 48 horas de detención por las siguientes razones:
1. No había testigos. A pesar de que le tomaron datos al conductor, los polícias de investigación no lo llamaron, la mujer que estaba en el vagón estaba dormida y nunca se percató de nada.
2. No hay cámaras en los vagones.
3. Yo podré «estar bien y superar el evento», la psicóloga expresó que tenía fuerza y «podría olvidar lo que pasó y seguir con mi vida normal».
4. En los datos que me enviaron dice que el tipo tiene familia que dependen de su economía.
Se determinó que podía salir en libertad.
El hombre se llama Mario Alberto Barrera Monzón (tiene cuatro perfiles en facebook), tiene 27 años, está casado, tienes dos hijos, una niña y un niño. Es guardia de seguridad en una empresa privada.
(Increíble).
Compartan para que todas tengan cuidado de este puerco.
Y saben, en realidad decidí publicar lo que me pasó para que todas la mujeres estén más en alerta.
Recomiendo no viajar en los vagones totalmente solitarios.
Y que se aseguren que nadie las siga en alguna zona en la que no vean gente.
Recuperar la seguridad no es fácil.
Me pasó a mí, evitemos que les pase a sus amigas, a sus hermanas, a sus hijas».
Basta !