Ecatepec
Karen de 17 años y su hermano Erik de 12, fueron asesinados dentro de su domicilio
Por: Frida Guerrera
ECATEPEC (05 AGOSTO 2020).- Hoy a cuatro años de que sus vidas fueron cruelmente apagadas, la justicia se vislumbra igual, la justicia en materia de menos infractores es la misma, protectora de esos delincuentes abrazados por la ley debido a su edad, las preguntas siguen sin respuesta por parte de quienes tienen en sus manos modificar las leyes adaptándolas a lo que lamentablemente es cotidiano, menores de edad asesinando, con la visión de saberse “bien librados” a lo mucho en cinco años, la pena máxima para ellos.
¿Por qué si la materialización del delito que cometen demuestra la capacidad, saña, determinación y dolo con que delinquen, no son juzgados conforme a la conducta y no a la edad? ¿Por qué si cada vez son más altas las cifras de feminicidas y homicidas menores de edad, la ley no se ha reformado?
El responsable del asesinato de estos dos hermanos, obtendrá su libertad el próximo año, su condena dictada por cinco años está por concluir, la vida de dos adolescentes con todo el empeño por crecer vale eso, una condena ridícula y dolorosa. Este sujeto tendrá la posibilidad si el programa readaptativo logro su objetivo, de continuar su vida sin asesinar ni violar a ninguna otra persona.
Karen, a cuatro años de que te quitaron la vida, no te olvidamos, sabemos que tú empeño y dedicación te habrían marcado el camino a ser la abogada que soñabas ser. Erik compañero inseparable de tú madre y de tu hermana, educado para ser un hombre recto, amable, solidario, trabajador. Dos hermanos que tenían algo que su asesino no soporto ver en ellos, eran hijos amados, junto a su madre formaban una familia unida, se apoyaban, respetaban, eran queridos por sus vecinos y compañeros de escuela, tenían una vida sencilla, tranquila, con planes a futuro, por los que cada día se esforzaban.
El responsable quiso borrarlos, que fueran olvidados, pero no es ni será así, en esta lucha por justicia de cada familia y de quien se une a la causa apoyando y visibilizando a las víctimas, son más quienes conocen a Karen y Erik a través de la voz y fuerza de Sacrisanta Mosso.
“Aunque quisieron que los olvidarán, que dejaran de amarlos; ellos viven en nuestros corazones y cada vez son más quienes se unen a este amor por Karen y Erik” Sacrisanta