Por falla en el corazón, muere Rubén Arellano, alpinista y reportero del Edoméx

Por: Nahielli Pulido

NEZAHUALCÓYOTL (17 AGOSTO 2020).- Con anécdotas, aplausos, risas y llantos, familiares y amigos despidieron al alpinista y reportero mexiquense, Rubén Arellano Chávez la noche del sábado en el Memorial Sor Juana, ubicado en el municipio de Nezahualcóyotl.

Cerca de las 8 de la noche del sábado, con una porra “Hasta la victoria siempre” y por varios minutos de aplausos, le dieron su último adiós a Rubén Arellano, quien falleció el viernes cerca de las 6:30 horas a causa de acidosis láctica e insuficiencia cardiaca grave en el hospital de Balbuena.

Arellano Chávez, dedicó parte de su vida al periodismo por varios medios de comunicación como fue en el Sistema de Radio y Televisión Mexiquense, como también columnista del periódico estatal A fondo e Infopolitano , además de subdirector en Comunicación Social del ayuntamiento de Nezahualcóyotl, conferencista, estratega de comunicación y desarrollo, vegetariano y rapero.

Pero, lo que más le apasionaba era el alpinismo y correr en las zonas boscosas, incluso su última salida fue al parque ecoturístico Apatlaco ubicado a escasos metros del Paso de Cortes, en el Estado de México, donde narró a través de un vídeo por Facebook que optó por salir a caminar luego de cinco meses de encierro, pero al encontrarse con un mar de gente, mejor decidió adentrarse al bosque ya que, le llenaba el alma y elevaba su vibración.

Rubén desde hace varios años se dedicó al alpinismo, pese a su diagnóstico de salud de estenosis aórtica que le detectaron a los cinco años de edad, sin embargo, no fue impedimento para realizar actividades deportivas, como el atletismo, alpinismo e incluso en el 2011 se aventó de un paracaídas.

El alpinista mexiquense llego a la cima del volcán Iztaccíhuatl, Nevado de Toluca, Nevado de Colima y el Pico de Orizaba (el más alto de México). Además del Mont Blanc, ubicado en Europa y el último que subió en febrero pasado el Kilimanjaro, localizado en el continente africano.

Rubén fue operado a corazón abiertos cuando tenía nueve y 21 años de edad, sin embargo, a partir de los 13 años empezó su pasión por el alpinismo. Sus ideas eran positivas y se identificaba con Mahatma Gandhi. Para él la vida era vivir al máximo e incluso inspiró varios de sus seguidores de sus redes sociales a tener una mente positiva.

“Ama a tus problemas, ellos creen en ti, por eso están ahí, para ayudarte a crecer, tu cree en ellos, míralos y diles “gracias”; “Si apuntas al cielo a lo mejor te quedas en la órbita de la Tierra, pero, si apuntas al Sol por lo menos llegas a la Luna”.

Rubén expresaba que cuando llegaba a la cima de un volcán, era porque su corazón le ayudaba a salir adelante y cada vez que llegaba a la cima disfrutaba ese logro pues los limites están en la mente.