Chimalhuacán
Sufre mujer por ataque canino… y de las autoridades en Chimalhuacán
CHIMALHUACÁN (01 JUNIO 2021).- Además de las heridas que le causó el ataque de un perro al defender a su nieto en la zona de San Agustín, una mujer padece la indolencia de las autoridades policiales y de salud.
La víctima –de 47 años- caminaba acompañada de su nuera y su nieto de 4 años en los límites de la Colonia Buenos Aires y Adolfo López Mateos cuando un perro –que sus propietarios mantienen encadenado en un predio sin barda-, se desató y trató de atacar al pequeño.
“Se fue directo sobre el niño y la abuela, para protegerlo, lo cubrió con su cuerpo”, narraron testigos de los hechos.
La mujer sufrió mordeduras en el cuello, la cabeza y la pierna derecha, y de inmediato fue llevada a una clínica particular, donde le atendieron las heridas, pero en las siguientes horas sintió malestar general.
Entonces, su familia pidió ayuda a policías municipales para que la Dirección de Zoonosis municipal resguardara al can, pero los agentes respondieron que primero necesitaban una valoración en el hospital.
Sin embargo, cuando acudieron al Hospital General de San Agustín, el personal ni siquiera aceptó revisarla.
De acuerdo con el portal del Instituto de Salud del Estado de México (ISEM), tras un ataque de este tipo, se debe localizar e identificar al animal agresor, verificar que tenga la vacunación antirrábica y que esté vigente, así como, observar al animal por 10 días después de la agresión.
“No mates al animal agresor, y de ser posible mantenlo en observación, en caso de ser un animal callejero o desconocido llama inmediatamente al centro antirrábico de tu localidad”, recomienda el ISEM.
Dicha recomendación fue ignorada por los policías, pues no cumplieron con llamar a la Dirección de Zoonosis municipal para mantener en observación al animal agresor.
Los vecinos de la zona piden la intervención de las autoridades municipales, pues han tratado de contactar a la Dirección de Zoonosis para que se encargue del animal, pero nunca les respondieron el teléfono.
“Queremos que hagan su trabajo para evitar una tragedia o ¿tiene que pasar algo más fuerte para que vengan?”, cuestionó una habitante.