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CHIMALHUACÁN (17 ENERO 2024). – Han pasado ya dos meses desde que el puente peatonal Los Rosales ubicado en la zona limítrofe de los municipios de Nezahualcóyotl y Chimalhuacán colapsó y a pesar de las personas lesionadas y los riesgos, los pobladores no tiene respuesta de las autoridades para su próxima apertura.

Fue el 2 de noviembre, en plena celebración de Día de Muertos, cuando el puente conocido como Los Rosales, colapsó mientras decenas de personas lo utilizaban para cruzar el Canal de la Compañía hacia el panteón para visitar a sus familiares que descansan en las instalaciones.

En el lugar, 13 personas resultaron lesionadas, pues al momento de la caída del puente, este prácticamente estaba a su máxima capacidad, y fue gracias a servicios de emergencia que las 11 personas lastimadas fueron atendidas en un hospital y dadas de alta solo dos días después a pesar de lo aparatoso del accidente.

Aunque posterior al siniestro, diversas autoridades como los presidentes municipales de las demarcaciones, Adolfo Cerqueda de Nezahualcóyotl y Xóchitl Flores de Chimalhuacán, así como la gobernadora del Estado de México, Delfina Gómez visitaron la zona, los vecinos reclamaron que las malas condiciones del puente ya habían sido advertidas desde meses atrás.

De acuerdo con imágenes de documentos oficiales compartidas en redes sociales los desperfectos que presentaba el puente peatonal ya habían sido informados a autoridades municipales, quienes entregaron respuesta hasta el pasado mes de agosto, sin embargo, no hubo trabajos de reparación a pesar de incluso contar con dictamen de Protección Civil que pedía la intervención de la Dirección de Obras Públicas.

Esto, aseguran los habitantes de la zona, fue determinante para que el «accidente» ocurriera, pues la estructura del puente ya presentaba flexiones y movimiento cuando las personas pasaban sobre el, no resistiendo más y cayendo aquel 2 de noviembre.

Posterior a los hechos, se determinó clausurar el paso en el área, afectando además, otro puente cercano para que se llevara a cabo su revisión, sin embargo, días después fue reabierto aparentemente por los mismos vecinos que tenían que utilizar vialidades automovilísticas para cruzar de lado a lado y dicen, les daba más temor que caer de los puentes.

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